viernes, 29 de abril de 2011

Desastre… natural?!

El terremoto de grado 9 ocurrido el pasado viernes 11 de marzo en Japón fue el principio de una cadena de desastres. Después de el terremoto hubo un tsunami con olas de hasta 10 metros horrorizaron al mundo.
El terremoto y las olas causaron daños graves a varias plantas nucleares en Japón, una de ellas fue Fukushima en la cual se produjo una explosión que liberó gases radioactivos a la atmosfera.
Fukushima tiene seis reactores. Cada uno está rodeado de un contenedor primario o vasija construido de acero reforzado de 20 centímetros.Es la línea de defensa más crítica contra una posible fuga. Si hubiera una brecha, hay una línea final de defensa, un edificio de contención de acero y cemento. Una fisura en este edificio liberaría las radiaciones en la atmósfera. Para saber la gravedad real de la situación, es importante conocer qué está ocurriendo en cada reactor.
Japón posee 53 reactores nucleares activos, agrupados en 17 centrales nucleares como la de Fukushima I. Cada central posee un número diferente de reactores nucleares. Cuando se inició el terremoto, estaban en funcionamiento 37 reactores nucleares de las 17 centrales japonesas. Tras el terremoto, las centrales de Fukushima I, Fukushima II, Onagawa y Tokai  interrumpieron el proceso de fisión en los 11 reactores que tenían operativos.
La primera gran diferencia entre los dos accidentes es la causa que los originó. En el caso de Chernóbil el accidente ocurrido el 26 de abril de 1986 tuvo como origen una serie de errores humanos. En el caso de Fukushima la construcción y los protocolos se han realizado siguiendo normas de seguridad muy estrictas. Los edificios han soportado el terremoto sin muchos problemas y los sistemas de refrigeración habrían funcionado si no hubiera sido porque el inesperado tsunami los inutilizó. En ambos casos se ha utilizado a una serie de personas, llamados liquidadores, que han luchado arriesgando sus vidas para minimizar los problemas dentro de la central.
Es posible que los efectos negativos del gran terremoto de 2011 se extiendan mucho más allá del nivel de desastre o accidente.












Karina Cecilio Bazán

lunes, 25 de abril de 2011

Productos "milagrO"!...Los riesgOs para la salud.

Prometen casi todo, pero no hay pruebas científicas que los respalden...
El mercado de estos productos inservibles y hasta dañinos se calcula en cientos de millones de pesos en México. Quienes los venden no hacen inventarios, no llevan registros ni garantizan su eficacia con evidencias científicas.
La CFEPRIS de la Secretaria de Salud ha identificado m as de 250 productos en México los cuales están mal clasificados. Estos productos milagro pueden clasificarse como suplementos dietéticos, medicamentos o remedios herbolarios no identificados como tales, cuyo caso no es obligatorio someterse a rigurosas pruebas de calidad, seguridad y eficacia. Un fármaco normal necesita estudiarse y ser probada en animales y proceso demora unos 10 años. Los daños no solo son sanitarios también económicos. A pesar de todas las evidencias por la mala legislación en el país no se puede hacer mucho para evitar esto!
Entre los más peligrosos se encuentran los que prometen adelgazar, además de ser fraudulentos, confunden a la población con mensajes contrarios a los estilos de vida adecuados ya que dan a entender que el ejercicio y una alimentación correcta no son necesarios para un peso adecuado. Las dietas milagro tienen una o más de las siguientes características: promesa de pérdida rápida de peso; la afirmación de que se puede llevar sin esfuerzo, "sin dietas y sin ejercicio"; aseguran que no tienen riesgos para la salud, cuando en realidad pueden tratarse de dietas muy restrictivas, que pueden provocar deficiencias nutricionales, desencadenar trastornos de la alimentación, favorecer efectos rebote y efectos psicológicos negativos.
Creo que una solución a esto sería informar más a las personas, así como anuncian sus beneficios también sus consecuencias e igual que la gente no sea tan ingenua, y alimentarse sanamente.






































Karina Cecilio Bazán

jueves, 21 de abril de 2011

* Desastre... natural?? *

El terremoto de grado nueve ocurrido en Japón fue el principio de una cedan de desastres. El tsunami subsecuente que ocurrió a 130 kilómetros de la costa nororiental de Japón con olas de hasta 10 metros.
  Propagación de la Energía del Sismo de Japón en el Pacifico
 El terremoto y las olas causaron daños graves a varias plantas nucleares en Japón. Fukushima una de ellas que produjo una explosión que libero gases radioactivos a la atmosfera.
La prevención de desastres consiste en tomar medidas razonables, basadas en la probabilidad de que se presenten fenómenos naturales dañinos, para minizar los estragos que estos puedan causar a la sociedad humana.
  El Reactor de Fukushima, Mostrando el Núcleo y las Dos Cubiertas de Hormigón que lo Protegen
 Un reactor nuclear consta de barras de combustible radioactivo, que sufren una reacción controlada de fisión a altísima temperatura, que hace hervir agua, la cual se aprovecha para generar electricidad.
En Fukushima el temblor, combinado con el tsunami, corto la energía eléctrica que alimenta las bombas de agua, y daño además las plantas de emergencia. Con lo que el material radioactivo podría atravesar la pared de acero del reactor y la doble cubierta de hormigón que lo protege, quedando expuesto y generando una contaminación desastrosa.
 Reactores Nucleares de Japón
 La refrigeración de apoyo tuvo problemas varias veces durante los últimos tres días en los reactores 1, 2 y 3 en la planta de Fukushima. En el funcionamiento normal de un reactor, neutrones de energía alta del combustible de uranio golpean átomos y los rompen, en una reacción en cadena que genera calor, nuevos elementos radiactivos como estroncio y cesio, y nuevos neutrones que continúan el proceso. La degradación natural de los materiales radiactivos en el núcleo del reactor continúa produciendo calor, llamado calor residual, que cae a un cuarto de su nivel original durante la primera hora, y luego desaparece más lentamente. Agregaron ácido bórico al agua de mar para intentar detener las reacciones nucleares. La refrigeración de los reactores es importante porque aunque se hayan detenido las reacciones en cadena, aun queda suficiente calor para fundir las varillas metálicas que rodean el combustible de uranio. Si estas se calientan lo suficiente, reaccionan químicamente con el agua que las rodea, lo que produce un gas de hidrógeno explosivo. Las explosiones de hidrógeno sólo dañaron al edificio externo, que colapsó, no a las estructuras internas.
Diferencia del Accidente de Chernobil
 En Chernobil las barras de control no lograron controlar la reacción de fisión en cadena, y esto llevó a explosiones que destruyeron el reactor, lo que derramó radiación que contaminó a Ucrania y Europa en el peor desastre civil en la historia mundial.










Brenda Lecona Velazquez

martes, 19 de abril de 2011

*Productos milagro. Los riesgos para la salud*

Tendrían que ser milagrosos para que de verdad curen alguno de los cientos de cáncer descritos por los oncólogos o combatir la obesidad mórbida sin necesidad de aplicar dietas, tratamientos rigurosos ni cirugías. En la medicina científica se basan en evidencias y no existen milagros ni las curas genéricas. Aun para una misma enfermedad cada paciente requiere tratamientos específicos diseñados según sus antecedentes clínicos, constitución física, edad y predisposición genética.
Según COFEPRIS de la SS los productos que se han identificado en México están mal clasificados algunos como suplementos dietéticos, medicamentos o remedios herbolarios que no son identificados como tales, en cuyo caso se someten a rigurosas pruebas de calidad, eficacia y seguridad que deben pasar los fármacos de patente.
Los productos milagro, por carecer de autorización pueden resultar nocivos para la salud de quien los usa; ya que solo pueden enmascarar los síntomas y signos de trastornos graves que ameritarían atención médica inmediata.
Aun permanecen en el mercado estos productos ya que es un marco jurídico insuficiente, que deja huecos legales de los que se aprovechan los productores y promotores para continuar con su negocio.


 












Brenda Lecona Velazquez